FORTALECER AL PERIODISMO

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ACADEMIA DE PERIODISMO Y COMUNICACION SOCIAL

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viernes, 12 de febrero de 2010

PRESIDENTE PERVERSO

Quiere Felipe destruir a Peña Nieto


PURGATORIO:


Ricardo Aguilar Castillo ha sido muy claro: el tricolor debe estar unido y fortalecido porque han aumentado los embates contra Peña Nieto y perredistas y panistas se han unido en matrimonio, por màs absurdo e incongruente, con miras a la elecciòn gubernamental del 3 de julio del 2011.
Y es que, como lo menciona al dirigente mel PRI de este infierno, la alianza "espuria" incluso ha cobrado su primera vìctima en el gabinete calderonista, pero Felipillo y su tìtere Cèsar Nava quieren el poder por el poder, y desde Los Pinos se maneja una campaña furiosa para atacar y despestrigiar a Peña Nieto, calculando que si le provocan un descalabro el año entrante, por automàtico le cerraràn los caminos a la candidatura presidencial. Pero no cuentan con el colmillo, austucia, disciplina, coraje y fuerza del priismo mexiquense.
El Estado de Mèxico no es Iztapalapa ni Guanajuato.
En los ùltimos dìas hemos confirmado que los embates contra el gobernador van en aumento y, mucho cuidado con los voceros de Televisa, como Joaquìn Lòpez Dòriga, porque si bien ahora se venden al mejor postor y ven crecer sus cuantas bancarias por el erario mexiquense, no hay que olvidar que en Chapultepec 18 se disparò contra la cabeza de Arturo Montiel y acabaron con sus aspiraciones presidenciales, pese a que esa empresa televisora saqueo las arcas de la entidad, como ahora lo hacen con Peña Nieto.
La traiciòn ronda los pasillos de Televisa y del palacio de gobierno de Lerdo, y si no, pregùnten a Manuel Cadena Morales quièn entregò los documentos contra Montiel y sus hijos al payaso Brozo. El tezcocano se cobrò la factura de no ser el gobernador actual.
Por lo pronto, como estima Ricardo Aguilar Castillo, los tricolores se deben acorazar ante al alianza que viene y ante los ataques contra el partido y el gobernador, y al llevarse a cabo la sesión ordinaria del Consejo Político Estatal del PRI mexiquense, en el que se presentó el programa anual de Trabajo para 2010, el dirigente del tricolor, Ricardo Aguilar Castillo, señaló que “este programa es el instrumento que define la meta política que los priístas vamos a alcanzar, y que no es otra, que la de ganar las elecciones para gobernador del 3 de julio de 2011”.
En su mensaje sostuvo que para llegar a ese objetivo, es indispensable la unidad, basada en la disciplina partidista, en la actitud institucional y en la lealtad absoluta al gobernador Enrique Peña Nieto.
Afirmó que la lealtad es un valor que practica toda la clase política priísta del Estado de México, y que ésta es observada, “cuando todos nosotros vivimos la política intensamente, siempre concentrados en el cumplimiento de nuestras responsabilidades”.
Indicó que el plan de Trabajo del PRI mexiquense para 2010, fija metas electorales a partir de un diagnóstico que contempla cualquier escenario; incluyendo la candidatura común del PAN y del PRD y rechaza el exceso de confianza, así como el inmovilismo, la apatía, la indiferencia y la simulación.
Aguilar Castillo puntualizó una estrategia de tres vertientes, la primera, consistente en el posicionamiento del PRI como el partido que firma y cumple sus compromisos de campaña; en segundo término el fortalecimiento de las estructuras organizacionales y electorales; y, como tercer vertiente, el trabajo institucional para que el PRI se mantenga unido, fuerte, activo, vigoroso en todas sus decisiones políticas.
Afirmó que el PRI del Estado de México, rechaza personalismos, futurismos, cofradías, cavilaciones, cálculos sucesorios y candidaturas anticipadas.
También, reconoció la labor que realiza el gobernador Enrique Peña, sostuvo que los priístas se encuentran unidos en torno al gobernador a quien –dijo- “vemos ejerciendo su liderazgo y autoridad en medio del desastre ocasionado por las lluvias que afectaron los municipios de Ecatepec, Neza, Chalco y Valle de Chalco, atemperando el descontento de las familias; llevando apoyos y encabezando los trabajos de limpieza de calles y de restauración de la infraestructura urbana”.

PARAISO:
Què dificil es mantener la congruencia en los principios polìticos y ser coherente con los mètodos y formas y fondos en esta contienda. Pocos hombres saben morirse en la raya antes de entregar su conciencia a las pràcticas pestilentes que ordenan sus correligionarios y encargados del partido, quienes cumplen al pìe de la letra las òrdenes de un Presidente que demuestra cada dìa sus decisiones tomadas con el hìgado y vive adentrado en los rinconces màs oscuros de los odios y rencores contra sus adversarios.
Por lo menos, almas en pena, una voz coherente se levanta contra la alianza "espuria" del PAN con el PRD y anuncia su renuncia al blanquiazul, partido en el que militò siempre, cuando ese partido era ejemplo de oposiciòn y tenìa en sus filas a los hombres y mujeres que lucharon, soñaron y murieron por una instituciòn polìtica que no acabò como ahora: en el basurero, cloaca y pantaño de la mediocridad.
Peña Nieto calificò de congruente la renuncia de Gòmez Mont, y de inmediato las marionetas de Felipillo Calderòn comenzaron a repetir que no habrà desbandada en el PAN, que no pasa nada, pero, por ejemplo, El Jefe Diego estudia ya tomar el camino del secretario de Gobernaciòn, al igual que decenas de panistas coherentes y honestos se aprestan a hacerlo, porque el PAN calderonista apesta y huele a estiercol.
En su oportunidad, El diputado Emilio Chuayffet Chemor (PRI), dijo que el alejamiento del secretario de Gobernación sirve a dos propósitos: al de decir públicamente que no tiene nada que ver con unas prácticas que en la política contemporánea actual está tomando el PAN; y segundo, que quiere tratar a todos en igualdad de circunstancias sin dados cargados y sin intereses específicos de partidos.
“Vamos a suponer que esto es real y que así se harán las cosas, ya que es uno de los poquísimos funcionarios de este régimen que sabe hacer sus cosas, pero lo que yo me pregunto es que si un Presidente tan panista admitiría tener en su gabinete a alguien que no milite en el PAN y si lo admite entonces hay que rascarle a la credibilidad de la renuncia”, sostuvo.
INFIERNO:

“Los derechos fundamentales de cada individuo, de cada ser humano que le son intrínsecos no parten de un mero reconocimiento, sino que están en el reconocimiento consagrado en los ordenamientos jurídicos, los que obligan a las entidades y a las instituciones para velar y garantizar su plena observancia”, afirmó el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, quien aseveró que para lograr este propósito se hace necesario el tener un Estado eficaz que esté a la altura, en la condición y en la capacidad que tenga para garantizar estos derechos sociales para la población.

Peña Nieto, junto con el titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Raúl Plascencia Villanueva, presidió el 17 aniversario de la fundación de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México, donde este último expresó que por su compromiso con la observancia y la defensa de los derechos humanos, así como por su infraestructura, el Estado de México es la primera entidad del país en este rubro

Peña Nieto sostuvo que justamente en ese propósito ha venido trabajando su administración, manteniendo una estrecha colaboración institucional con la Comisión Estatal de Derechos Humanos, para que en cada una de sus actuaciones y espacios del deber público “haya observancia plena a los derechos fundamentales”, y que cuando esto no ocurra se dé cabal cumplimiento a las recomendaciones que emite esta instancia, aunque reconoció que aún se tienen asignaturas pendientes en esta materia.

El mandatario mexiquense coincidió con el comisionado nacional de los derechos humanos, en el sentido de que en el marco de la conmemoración del Bicentenario del inicio de nuestra Independencia nacional y del centenario de la Revolución mexicana nos invita para que hagamos un mayor esfuerzo para la redefinición que tengamos los mexicanos de hacia dónde debemos transitar en un nuevo derrotero, en la actuación del Estado mexicano.